Carbón activo para filtrar el agua
El carbón es uno de los medios más antiguos para purificar el agua. Existen muchos tipos diferentes, pero aquí vamos a hablar de los 2 principales: el carbón granulado y carbón en bloque en polvo comprimido. En Amilo hemos elegido el segundo tipo por su capacidad de retención mecánica (absorción), muy superior a la del carbón granulado.
Además, el carbón de tipo "bloque" que utilizamos tenderá a saturarse mucho menos rápidamente y, por tanto, a liberar contaminantes en el agua. Por este motivo, los cartuchos de filtración de carbón en bloque de Amilo pueden filtrar 200 m3 de agua antes de tener que cambiarlos.
Un carbón muy específico
El carbón comprimido en "bloque" que utilizamos en nuestros cartuchos de filtración de agua Amilo procede del coco. De hecho, la cáscara de este fruto, una vez tratada, tiene la mayor capacidad de retención que existe. Además, tiene la capacidad de actuar sobre 2 fenómenos físicos bien conocidos: absorción y adsorción. Esta característica le permite retener moléculas mucho más finas que su valor nominal de 0,3 y 0,5µ, según el modelo. Esto se debe a que las partículas sintéticas más pequeñas del agua son "magnetizadas" -o "atraídas"- por los poros atrapadores del carbón de coco mediante una inversión de la carga (polaridad). Se trata de una acción electrostática.
Para saber más sobre los distintos tipos de carbón vegetal y comprender cómo filtra el agua el carbón de coco, puede leer este artículo dedicado a ello.

Este carbón activado tiene la mayor fuerza de adsorción física y el mayor volumen de adsorción de cualquier material natural o sintético conocido. La superficie del carbón activado puede superar los 1.000 m²/g. Esto significa que la superficie desarrollada por 3 g de carbón activado cubre la superficie de un campo de fútbol.
La filtración es ultrafina y, sin embargo, prácticamente no hay caída de presión
Este es uno de los muchos puntos fuertes del carbón activo comprimido Amilo. Esta nueva tecnología revolucionaria mezcla fibras impregnadas de carbón activado polvo. Los cartuchos se moldean en húmedo para producir un carbón comprimido. Este conjunto combina las cualidades de retención del carbón en bloque para una microfiltración muy profunda hasta una finura de 0,5 micras, manteniendo al mismo tiempo un elevado caudal de agua en toda la vivienda.
Carbón de coco activador
Lo llamamos carbón activado porque el carbón de coco se rocía con agua cuando aún está a alta temperatura. Esta activación favorece la dilatación de los llamados poros "atrapadores", lo que le confiere una superficie específica de contacto -y, por tanto, de retención- mucho mayor que la de cualquier otro tipo de carbón vegetal.
El carbón y el problema de las bacterias
En virtud de su estructura y de los poros atrapadores que hemos mencionado, el carbón vegetal puede favorecer el desarrollo de bacterias. De hecho, estos poros podrían compararse a una esponja (dura, sin la parte esponjosa) con sus micronichos y alvéolos, en los que las bacterias podrían alojarse y proliferar.
Especialmente afectados: garrafas con filtro
Garrafas con filtroque tuvieron su apogeo en la década de 2000, están mucho más preocupados por el problema de las bacterias. ¿Por qué? Por varios factores relacionados con su uso:
- transición permanente de un estado húmedo a otro húmedo o incluso seco.
- exposición al aire libre
- exposición a la luz
- manipulación frecuente con las manos
- mantenimiento descuidado
Estos parámetros no se dan, o mucho menos, con un filtro Amilo. Está protegido del aire, está poco expuesto a la luz solar (a menudo se instala en el garaje o en el sótano) y no necesita ningún tipo de manipulación, aparte de cambiar los cartuchos cada año. Además, es muy raro que el agua se estanque en el interior de los portafiltros. Sin embargo, el agua puede estancarse cuando se va de vacaciones o se ausenta durante largos periodos. Por eso, en Amilo, el cartucho de prefiltración y los 3 portafiltros que componen el equipo se impregnan sistemáticamente con partículas de plata estabilizada.
El poder bacteriostático de la tecnología Microban© de plata
La plata es conocida desde la antigüedad por sus propiedades antimicrobianas y antifúngicas naturales. La plata antimicrobiana que impregna los cartuchos de prefiltración y los portafiltros Amilo utiliza la Tecnología Microban - una técnica probada que ha sido sometida a numerosas pruebas, tanto por su eficacia bacteriostática como por la posible liberación de partículas de plata en el agua. La tecnología Microban ha recibido numerosas certificaciones, en particular de la EPA (Agencia de Protección del Medio Ambiente).
